26.4.10

El más premiado: Juan Pablo Oliva

Juan Pablo Oliva es el realizador del documental “Registro”, ganador de 3 premios en la 4° edición del FICO. Este excelente trabajo, que muestra la realidad laboral diaria de los mineros del Cerro Rico de Potosí, obtuvo las siguientes distinciones: Mejor corto documental (compartido con las producciones españolas "Yelda, la noche más larga" y "Asämara"), Mejor corto argentino, y el premio de la distribuidora hasta 30 minutos, que consiste en la distribución gratuita del corto .
Luego de recibir las distinciones Juan Pablo dialogó con nosotros.

¿De qué trata tu cortometraje?

"Es un trabajo sobre el trabajo minero en el Cerro Rico de Potosí, Bolivia. Lo filmé en febrero de 2008".
                    

¿Cómo fue la filmación?

"Yo no fui puntualmente a filmar el documental, sino que estaba viajando y me encontré con esta gente en Potosí. Hice el tour que todos hacemos cuando vamos a Potosí y me pareció que era un realidad que estaría bueno hacer un registro. Así que me puse en contacto con la cooperativa, pedí la autorización y estuve una semana y media entrando con los mineros conociéndolos, sin filmar, ni nada. Y después en una semana lo filmé, yo solo, con muy poco equipo técnico. Lo que me permitió desenvolverme con facilidad dentro de la mina y también les permitió a los mineros no intimidarse ante la cámara, porque casi ni existía la cámara, era como un ojito que daba vueltas".


¿Cómo te sentiste al ser premiado?

"El hecho de haber enviado el documental acá, a Olavarría, al festival y haber sido seleccionado, para mí ya era un premio. La verdad fue una sorpresa enorme haber recibido tanta aceptación, y la verdad me superó. Se notó cuando tenía que hablar, no me salían las palabras porque estaba realmente emocionado, muy contento y muy agradecido".


¿Por qué elegís la categoría documental?

"Yo en un principio hacía cortos ficcionales y tenía la dificultad del diálogo, no me gustaban los diálogos. En un corto los diálogos son bravos y siempre había mucho diálogo en los trabajos que hacía compartidos. Todos cortos que hice eran sin diálogo y eran bastante documentales, a pesar que eran ficcionales. Fue como que me fui preparando sin darme cuenta para hacer registros así, porque no es un documental, documental, que cumple con la estructura. Es un registro. Antes que este hice dos registros bastante similares a este, no sobre el trabajo minero, pero con una estructura y una estética parecida a lo que resultó este también". 

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